01- Es una mierda, como siempre.
    02- A mí lo que me gusta es dar vueltas alrededor de un cojín.
    03- No me acuerdo de cómo era antes, ni me importa.
    04- Me asustan mucho estos señores que insisten en hablar conmigo.
    05- No sé, yo no tengo internet.
    06- Me estoy haciendo pis desde hace más de media hora.
    07- Te he visto comerte los mocos en un semáforo.
    08- Lo siento, he quedado.
    09- Déjame en paz, yo llegué aquí buscando una página porno.
    10- No, yo ahí no pienso subir.
    11- Nunca consigo hacer la firma igual.
    12- Yo ya te digo, a mí me mola más ella encima.
    (la respuesta correcta está premiada con un fabuloso tenedor de acero inoxidable)
    La próxima vez que limpies una ventana de doble hoja, procura fijarte en la gran diversidad de insectos que quedan atrapados entre ambos cristales y mueren de puro hastío. Es una ocasión única para aprehender las infinitas variedades del mundo natural y, por qué no, para motivar a los pequeños urbanitas a escaparse un fin de semana a buscar sus raíces en una colina, o un valle, o un promontorio.
    Por cierto, a ver si alguien se ha dejado por aquí (estoy haciendo inventario) uno o más de los siguientes objetos: una goma de borrar «Milan Nata», un bañador tipo farda-huevos talla XL, una cuchilla de afeitar mellada, juego de gemelos de bisutería con brillante de plástico, un salvamanteles del Pato Donald, gafas y tubito de bucear, una bolsa de deporte «Carrefour» con cinco bolsillos. Ya está. Es que no recuerdo ser su dueño. Mil gracias.